Shameless: Una Serie de culto
CULTURA

Shameless: Una Serie de culto

Una narración ágil, fresca, con protagonistas profundos y bien construidos, por la cual también desfilan una serie de personajes que aportan sazón a la vida de los Gallagher.


Por Nicolás Pienovi - Especialista en contenidos en EE.UU, Brasil, Argentina y Chile

No se trataba de una familia amiga o conocida, tampoco de volver al pasado y ver a Al Capone en el mítico Green Mill. Más bien estaba transitando por el medio del rodaje de algunas escenas de la serie de televisión Shameless. Si bien en su origen Shameless es una serie británica estrenada entre 2004 y 2013 en Channel 4 (U.K.) y que tuvo una versión turca (en español llamada Amor de familia) con 70 episodios al estilo telenovela (algo que tanto nos gusta en Latinoamérica), la versión con la que me topé en el lado sur de Chicago era la de Showtime, la que se ha consagrado como la serie con guion original más larga de la historia de esta filial de Paramount y que ha sido nominada y ganadora de múltiples premios a lo largo de los años, destacando entre muchos los Golden Globe y los Primetime Emmy Awards.

La serie es una creación del productor y guionista Paul Abbott, quien nació en el seno de una familia disfuncional siendo el séptimo de ocho hermanos. Cuando tenía nueve años, su madre abandonó el hogar y los hermanos Abbott pasaron al cuidado de su hermana mayor de diecisiete años, que estaba embarazada. La ficción producida por el mismo Abbott y desarrollada por John Wells, no está muy alejada de la vida de su creador, ya que nos muestra en tono de comedia dramática la historia de la disfuncional familia de Frank Gallagher (William H. Macy), un padre soltero que mientras pasa sus días borracho, su hija mayor Fiona (Emmy Rossum) es quien se tiene que hacer responsable por cuidar al resto de sus hermanos (dentro de los hermanos está Lip, interpretado por Jeremy Allen White, hoy reconocido por su papel en la serie The Bear). La progresión de la narración se aborda a través de un relato coral, donde veremos a cada uno de los hermanos Gallagher crecer en pantalla, esto debido a que la serie tuvo 11 temporadas que se emitieron entre 2011 y 2021, sabiendo adaptarse a los problemas propios de las distintas edades y personalidades de cada uno de sus personajes, pero también leyendo muy bien lo que sucedía fuera del set de grabación para estar en sintonía con los intereses y cambios culturales de las audiencias a lo largo de los años y, con ello, lograr que el espectador pudiese sentirse fácilmente identificado.

Una narración ágil, fresca, con protagonistas profundos y bien construidos, por la cual también desfilan, entrando y saliendo constantemente, una serie de personajes que aportan sazón a la vida de los Gallagher, tal como sucede con la realidad de nuestras propias historias. Aquí vale la pena mencionar a Sheila Jackson y Jimmy Lishman, interpretados por Joan Cusack y Justin Chatwin, respectivamente.

Con un núcleo familiar carente y atípico, apoyado por una cámara inquieta y de la mano de un desarrollo de guiones que supieron visibilizar e indagar en el mundo de las enfermedades mentales, destapar un universo de vicios y adicciones sin un objetivo moralizador, normalizar y liberar la diversidad sexual e introducir en sus tramas temas de actualidad que fluyen de manera natural (como la presidencia de Obama, el triunfo de Trump o el Covid, entre otros) y que visualmente nos recuerdan al imaginario del novelista germano-estadounidense Charles Bukowski, representante de un realismo sucio debido al excesivo uso de la cotidianidad con el alcoholismo, lo vulgar y la pobreza, es que Shameless se alza como una serie de culto, desvergonzada, alejada del constructo social arquetípico, que se viste de humor negro y que con su crudeza roza los límites de lo inverosímil.

La serie estuvo originalmente en televisión lineal a través de Showtime Estados Unidos en la franja prime de los domingos en la noche. Luego fue parte del catálogo de Netflix, sin embargo, hoy puedes disfrutar de sus 134 episodios y a tu propio ritmo en el streaming de Max (ex HBO).