Ali vs Frazier
EDITORIAL

Ali vs Frazier

El 1 de octubre de 1975 se realizó una pelea considerada como una de las más duras de la historia por el campeonato mundial de boxeo de los pesos pesados: Joe Frazier vs Muhammad Ali. Se trataba del tercer encuentro entre ambos campeones y se anticipaba que tendría proporciones épicas.


Gustavo Yentzen Wilson | Director Visión Frutícola

El combate fue muy duro, ambos boxeadores no escatimaban en su esfuerzo por noquear a su oponente. En un momento de la pelea Ali, visiblemente cansado, le dijo a su entrenador: “no puedo más, abandono”. Angelo Dundee lo escuchó y logró convencerlo de que saliera a pelear un round más. Agotado, Ali obedeció, salió y logró resistir hasta el toque de la campana; volvió a su esquina y nuevamente le dijo a su entrenador: “no puedo más, tira la toalla, no tengo más fuerzas”. Dundee logró convencerlo nuevamente de que saliera a pelear un round más.

Ali no estaba convencido, estaba verdaderamente agotado, pero finalmente salió, dio y recibió más golpes y, al terminar el round, volvió extenuado y le dijo a su entrenador: “ya está, terminé, tira la toalla”.

Dundee volvió a escucharlo, lo contuvo y finalmente le dijo: “Te voy a pedir un solo favor, cuando suene la campana solo párate y anda al centro del ring”. Ali lo escuchó y, con la poquísima fuerza que le quedaba, al sonar la campana se puso de pie y casi arrastrándose logró llegar al centro del ring. Su rival Joe Frazier no fue capaz de pararse. Ali fue elegido campeón mundial.

El año que concluyó es probablemente el más duro de que se tenga recuerdo en la industria frutícola chilena y peruana. Las variables que han afectado a nuestras industrias son múltiples. Sin duda, uno de los aspectos que mayor impacto tuvo, fue la mutación de algunas compañías navieras: de socio – estratégico a solo un feroz proveedor de servicio estratégico, aprovechando la oportunidad que les dio la pandemia para recuperar años de pobres resultados, y de paso afectando gravemente a productores y exportadores frutícolas.

Otro elemento que ha tenido una altísima incidencia es la inflación y sus efectos sobre el costo de los insumos, lo que sumado a la reticencia de muchas cadenas de supermercados a traspasar estas alzas en los costos de producción a sus consumidores finales, hizo que los márgenes se redujeran y, en muchos productos, llegaran hasta los números rojos. Aquí, sin duda, hay una oportunidad para las asociaciones gremiales e importadores en destino para generar un canal de comunicación formal con las cadenas de supermercados, que hoy lamentablemente no existe.

Obviamente hay muchas variables más. Sequía, inestabilidad social y política, mercados volátiles, guerras de potencial alcance mundial, entre otros.

La situación de la industria actualmente es dura. Sabemos que no cambiará en el corto plazo, quizás habrá empresas que no terminarán este año, y muchas otras seguirán pasándolo mal. Sin embargo, el llamado es a ser capaces de invocar a nuestra fortaleza emprendedora, apelar a ese entrenador interior, lograr sacar fuerzas de flaqueza para presentarnos nuevamente en el centro del ring, y dar la pelea una vez más.